La unión Europea, al más puro estilo séptimo de caballería, ristra de billetes en mano, viene tocando la corneta para rescatar España. A rescatarla de nosotros mismos. Aunque yo diría que vienen a secuestrarnos, y a tenernos bajo su yugo durante los próximo años.
Tengamos clara una cosa, nadie da duros a cuatro pesetas, o lo que es lo mismo, nuestros “socios” europeos, no van a prestarnos una cantidad ingente de millones de euros sin pedirnos nada a cambio. Y ese, “a cambio”, ya sabemos en que consiste, lo hemos visto en otros países de nuestro entorno y sabemos que se trata de meter la podadora hasta el ras, y cuando ya no quede nada, recortar un poco más por si acaso.
Sé que siempre se ha dicho que es necesario tocar fondo para empezar a subir. Pero dónde está el final, cuándo tocaremos fondo y será el momento de empezar la remontada, tendrán que subir los impuestos hasta el 30%, habrá que aumentar la edad de jubilación hasta los 70 años, tocaremos fondo cuándo empiecen a despedir a funcionarios de carrera, cuándo exista el despido libre, será necesario que la tasa de paro esté en el 50%... Sea cuándo sea, nos podíamos ahorrar el sufrimiento, ponernos las pilas y empezar a trabajar para sacar a nuestro país adelante como si ya hubiésemos caído en el abismo.
Para qué vamos a estar retrasando lo inevitable. Está claro que si depende de nuestros gobernantes o de nuestros “socios” europeos, nos vamos a estrellar a toda velocidad contra el fondo, así que vamos a empezar a levantar España, vamos a cambiar de mentalidad, ya está bien de decir constantemente que “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”, dejemos de autocompadecernos, ya lo sabemos, lo hemos dicho mil veces, “todo lo que pasa es por la herencia recibida”, y que tampoco se nos olvide el famoso “y tú más...”.
Pero ¡ya está!, ya nos hemos desahogado, ahora toca remar todos juntos en la misma dirección. Nadie va a sacarnos de esta con un chasquido de los dedos, ni con una palmada en la espalda, y tampoco lo harán tropecientosmil millones de euros, que tendremos que devolver a un interés muy interesante para nuestros “socios”, ellos sólo están esperando que nos hundamos para aprovecharse de nosotros cuando les pidamos ayuda (menuda mierda de socios, por cierto). Aquí los únicos que con su esfuerzo, su capacidad de superación, su habilidad para reponerse a la adversidad y su desparpajo pueden recatar España son los españoles. Ya lo hemos hecho mil veces, pues hagámoslo otra vez.
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