¡Que se jodan! (II)

Continuando con mi reflexión del otro día, "que se jodan" es una de las expresiones más completas que haya escupido nunca el español. Y ahora a tocado decirle "que se jodan" a los empleados públicos.

Cuando Mariano Rajoy, Presidente del Gobierno de España, comunicó a todos los trabajadores de las administraciones públicas que no cobrarían la paga extra de navidad, que les recortaría los días libres y que les aumentaría la jornada laboral, lo que quería decir en realidad era "que se jodan los funcionarios".

No tengo muy claro hasta que punto odia a los empleados públicos, pero lo que está claro es que nos odia. Algo que por otro lado es extraño, ya que tanto él, como muchos de sus ministros, e incluso sus hermanos, pertenecen a la función pública. Es posible que Rajoy y compañía piensen que se ganaron el puesto y a los demás nos lo han regalado, o que crean que los últimos que han entrado en las administraciones son del PSOE y debe cargárselos. Lo que es seguro es que está haciendo buena la frase "todos al suelo que vienen los nuestros" es como si al tratarse de uno de nosotros tuviera carta blanca para machacarnos porque al hacerlo también se machaca a si mismo.

Sin embargo, no podemos perder de vista que, si bien el Sr. Rajoy es miembro de la función pública (registrador de la propiedad), también lo es de un partido político en el que ejerce activamente desde antes de ser empleado público, y que además ostenta un cargo político desde hace 30 años. Así es que no parece que sepa muy bien lo que es ser empleado público.

Lo que por supuesto no sabe, es lo que sienten los empleados públicos cuando la sociedad les critica constantemente, les desprestigia, les insulta gratuitamente, les señalan continuamente como unos vagos y vividores aunque se dejen la piel en el trabajo, les miran como si fueran unos apestados y les señalan como los responsables de la crisis… Y tampoco sabe, porque se lo lleva crudo desde hace muchos años, lo que es perder continuamente poder adquisitivo, que te congelen el sueldo cada dos por tres, o que directamente te lo quiten del bolsillo.

Seguro que muchos me dirán que a los políticos también se les han recortado y congelado los salarios, y eso es cierto, pero en el caso que nos ocupa, como en muchos otros, toda esta casta de políticos no sólo ganan un salario acorde a la responsabilidad que tienen, sino que no pagan nada o casi nada. Alguno se imaginan a Don Mariano pagando un café...? Además de todos los regalos y prebendas que supone sentarse en un escaño, productos tecnológicos de última generación, coches oficiales, gastos de representación... Coño! Si hasta les pagan la ADSL en casa.

Así que querido empleado público, cuando éste año no puedas celebrar las navidad, comprarle regalos a tus familiares, cuando no dispongas de tus días libres por antigüedad ni de los de libre disposición... Y sobre todo, cuando veas que todo ese esfuerzo no ha valido para nada, acuérdate de que uno de los nuestros se ha fijado en ti y ha decidido "que te jodan".

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